Nuevas estrategias en el capital de riesgo: el surgimiento de fondos más pequeños y especializados
En los últimos años, el capital de riesgo ha experimentado un cambio significativo, pasando de ser una actividad dominada por pequeños grupos de financistas a una industria que maneja enormes sumas de dinero.
Sin embargo, algunos inversores están resistiendo este enfoque «cuanto más grande, mejor» y están formando fondos más pequeños y especializados que se centran en inversiones a largo plazo y en empresas emergentes con necesidades de capital más modestas.
La visión de Nick Chirls y Asylum Ventures
Nick Chirls, después de casi una década liderando su propia firma de capital de riesgo, Notation Capital, decidió crear un nuevo fondo bajo un enfoque distinto. A pesar del éxito de Notation, que recaudó tres fondos y apoyó a más de 100 empresas, Chirls se sintió desilusionado con la dirección en la que se movía el capital de riesgo, especialmente con la creciente obsesión por manejar grandes sumas de dinero. Esta tendencia, según Chirls, deshumanizó el negocio, llevándolo a formar Asylum Ventures junto con Jonathan Wu y Mackenzie Regent.
Asylum Ventures, con un fondo de 55 millones de dólares, se diferencia de otros grandes jugadores en la industria al enfocarse en realizar solo cuatro o cinco inversiones al año y priorizar empresas que no necesiten recaudar grandes cantidades de capital en rondas sucesivas. Según Chirls, la idea es financiar compañías que requieran pequeñas inversiones iniciales, incluso tan bajas como 500.000 dólares, una cifra inusualmente modesta para el sector.
La resistencia al modelo de capital masivo
El enfoque de hs no es un caso aislado. Otros inversores, como Bryce Roberts de Indie.vc, han promovido iniciativas similares que priorizan la creación de negocios sostenibles en lugar de buscar grandes cantidades de financiación. La firma Terrain también ha instado a los emprendedores a explorar nuevas formas de expandir sus negocios sin depender de las tradicionales rondas de inversión de capital riesgo.
Esta tendencia refleja un creciente desacuerdo con la evolución del capital de riesgo, que ha pasado de respaldar pequeñas startups con alto riesgo a invertir miles de millones en empresas emergentes con poca diligencia. Según PitchBook, el capital de riesgo gestionaba 1,1 billones de dólares en 2023, una cifra que contrasta fuertemente con los 297.000 millones de dólares en 2013. Esta expansión ha cambiado la dinámica de la industria, y muchos inversores como Chirls creen que ha dañado lo que hacía especial al sector tecnológico.
El modelo de Asylum y su inspiración en A24
El modelo de inversión de Asylum encuentra inspiración en la compañía cinematográfica independiente A24, conocida por fomentar proyectos creativos y pequeños que los grandes estudios de Hollywood no tocan. De la misma forma, Chirls y sus socios buscan respaldar startups tecnológicas que puedan desarrollar proyectos innovadores sin la presión de obtener grandes rondas de inversión.
Hasta ahora, la estrategia ha mostrado resultados prometedores. Notation Capital, la firma anterior de Chirls, consiguió un rendimiento superior al promedio de la industria, multiplicando más de tres veces el capital recaudado en su primer fondo. Esto demuestra que los fondos más pequeños pueden competir eficazmente, sin necesidad de recurrir al tamaño como medida de éxito.
Hacia un enfoque más sostenible
El enfoque de Asylum y otros fondos similares representa una pequeña pero significativa resistencia al capital de riesgo tradicional. Si bien todavía son una minoría, estos inversores esperan que, a largo plazo, su modelo demuestre que es posible construir startups exitosas y sostenibles sin necesidad de sumarse a la carrera por obtener grandes inversiones. Según Bryce Roberts, es posible que este enfoque valide nuevas formas de inversión que prioricen la sostenibilidad y la innovación genuina.
Un futuro más equilibrado
A medida que más fondos como Asylum y Indie.vc ganan terreno, es posible que el capital de riesgo recupere parte de su enfoque original: apoyar a pequeñas empresas emergentes con alto potencial que requieren financiamiento adecuado a su tamaño y necesidades, en lugar de centrarse en acumular grandes sumas de dinero. En última instancia, este enfoque podría fomentar una mayor innovación en el sector tecnológico, creando oportunidades para empresas emergentes que realmente cambien la industria, en lugar de simplemente seguir la corriente del capital masivo.